23rd Father’s Day Celebration


Imagen: @porliniers

When I was born, 23 years ago, my dad’s father passed away. Yes, Francisco, my grandfather whom I never got to know, passed away the very same day I was born. Rumor has it that he forgot to take his pill for the heart and he had some sort of cardiac arrest that, well, he couldn’t overcome.

I’ve never really asked my dad how he felt that day. I’m pretty sure I’ll never ask him that either, what’s the point, right? My mom never knew her father-in-law, so I guess she didn’t feel much either. My dad’s mom passed away when he was 16. She died of cervix cancer, in times when cancer wasn’t even such a familiar disease to the people in Peru. «Now cancer is an every-day thing», my dad said once.

My dad and I never really talk that much. He hasn’t been able to economically support any academic-related activities in my life, never gave me any monthly allowance -like the rest of my friends back in highschool-, never asked me if I wanted a sweet fifteen party (which of course, I didn’t even want anyway), never asked me if I dated any guys or gave me the «sex talk» that you see parents doing on TV. He has no idea whether or not I’ll finish school this year or the following. Actually, when I didn’t get into university the first time I took the entrance exam, he told to me to try a state-funded university. I hated him that day.

But when I was a kid, he drew (because he used to be an expert at technical drawing) Adam and Eve for me as part of my homework, and taught me that men and women are different just like them. He would pick me up from school every freaking day in his car to make sure I wasn’t going to be smoking pot or engaging into any gang’s fight (yup, that was my highschool).

He would buy a newspaper -sometimes two or three, good and bad- every freaking day and let it laying in our dinner table so everybody would read it. That’s how I learned about «the news». He gave me his Marxist books from the 70s when I was 15, which opened my mind to a leftist world that I sill admire and criticize so much.

When I was nine, he enrolled in a computer class which he used to take me to. He didn’t learn shit (he can’t even turn on a desktop), but I did, and I’ve developed that knowledge to the point that I actually get paid for it now.

Last Christmas, we all got into an awful fight about something stupid, which was mainly my fault. At the table, when we calmed down, he thanked the Lord for having given him a child like me. Yup, that Lord that he once told me it was a merely human creation to fulfill the eternal void of its existence. Today, while we’re still together, we will celebrate one more of this traditional Father’s Day thing, even though he’s in bed recovering from a surgery.

I guess this is my way of saying that even though he hasn’t and doesn’t give me much, I learned how to take advantage of the little things I did get, which ended up leading me to greater things. That has become my philosophy of life.

De religiones y Web 2.0


¿Acaso no practicar una religión te convierte en su enemigo? Una nueva mirada desde Alain de Botton

Imagen: alaindebotton.com

Anoche tuve el placer de disfrutar, una vez más, una de las conferencias de TED, esta vez recomendada por @stolenbeat. Resulta que Alain de Botton, filósofo y escritor suizo –actualmente reside en Londres– fue invitado a dar un sermón sobre cómo la secularización ha aniquilado cualquier posibilidad de armonizar los buenos ejemplos que las religiones pueden aportar al mundo de los contentos y seguros ateos. «Rescatar y disfrutar los mejores pedacitos de la religión» es una propuesta hasta denigrante para el ateísmo, pero no es tan loca como parece.

Me explico [más bien, resumo lo que Alain expuso].

Asumamos que las religiones son invenciones para encontrar consuelo, orientanción y esperanza antes las adversidades. Aceptemos que creer en Dios es creer en un cuento de hadas y, por ende, Jesús y toda su historia es una malinterpretación de los Evangelios resultante de la Escuela Escolástica del Medioevo. Ahora, ¿podemos ignorar el arte, la literatura, las costumbres –ahora respaldadas por el marketing– como la Navidad y Semana Santa que ha dejado, en este caso, el catolicismo?

«Hasta ahora, las personas se han visto ante una elección desagradable: o aceptas la doctrina y accedes a todo lo bonito que conlleva, o rechazas la doctrina y vives en una especie aislamiento espiritual guiado por CNN y Walmart» [risas].

Sin ofender a nadie, he creído, desde hace unos años y por una serie de experiencias (sí, infortunios, como todos tenemos) que la religión solo puede ser considerada importante cuando encuentras en ella lo que nadie más puede satisfacer. Algunos no la buscan, sino más bien crecen en ella, y otros se convierten luego de haberla ignorado por muchos años. Yo no la busco y no le encuentro sentido litúrgico-espiritual; sin embargo, sí utilizo muchísimos de los valores de la religión cristiana y, quien sabe, tal vez Zen o algunas otras que ni cuenta me he dado, para regir mis proyectos de vida.

Pues bien, si realmente crees que rezar no trae ninguna otra consecuencia más que un agradable consuelo mental, que Dios no existe pero no dudas en decir «¡Dios, qué es eso!» cuando algo te sorprende, ¿eres ateo, agnóstico o tan solo un simple partirdario del eclecticismo?

«Pienso que hay una alternativa. Creo que hay maneras, muy respetuosas y completamente paganas, de robar a las religiones. Si no crees en una religión, no hay nada de malo con escoger y mezclar extrayendo lo mejor de la religión.»

De esta manera, aunque él no lo llama así, De Botton nos interpela a adoptar una filosofía olvidada nacida en Grecia que hacía básicamente lo que ahora hacemos en internet: take and mixEl eclecticismo fue un intento de armonizar diferentes aspectos de otras filosofías para darle un sentido no doctrinario pero medianamente coherente para ser aplicado a la vida. Es como la tolerancia materializada.

Sigue leyendo

La PUCP de cada día


Adecuar estatutos, negociaciones avanzadas, campañas marketeras y Sigrid Bazán en las noticias

El pin de esta foto forma parte de la campaña «Somos PUCP, seámoslo siempre», que más a o menos ha encontrado un suitable spokesman  en la columna de José Godoy, publicada hoy en Diario16.

Con una serie de aplicaciones de Facebook y otros artilugios de la adorada Web 2.0, la PUCP ahora defiende su imagen de manera oficial y hacia afuera, cuando hasta el momento solo los alumnos y profesores se habían encargado de esta complicada tarea. Antes de esta campaña, se creó este espacio, que está más enfocado a una tarea de comunicación interna que hacia el público común y silvestre que no le importa la PUCP (let’s face it, some people don’t have to care, right?)

De más está decir que la cantidad de noticias sobre este conflicto han terminado por definir bastante bien los roles de los involucrados. El Arzobispado no representa completamente el catolicismo y, como muchos ya sabíamos, las divisiones en la Iglesia (léase hacia Cipriani) han sido notoriamente sorprendentes en estas semanas.

Otro hecho that catches the eye es la posición casi unánime de decenas de profesionales, ahora en medios de comunicación o cercanos a ellos, que han figurado en columnas y blogs en defensa de la PUCP.  Por otro lado, los alumnos han tomado ahora la posta de la opinión más escuchada, a través de Sigrid Bazán, presidenta de la Federación de Estudiantes.

Resulta curioso cómo dentro de la universidad la voz de los alumnos –los pocos que se involucran– no tiene mucho voto en temas económicos, como el de las boletas –incluso recuerdo que tomó como tres años bajar las impresiones en B/N de 50 a 10 centavos–, pero de repente, la misma institución comienza a mantener un romance enardecido con esa voz cuando habla a su favor. Concuerdo con Sigrid (@sigridbazan) al cuestionar ese hecho aquí.

Depués de esta experiencia, esperemos que las autoridades de la PUCP entiendan el gran beneficio que puede representar el cuerpo estudiantil en tiempos de crisis y no voltear la mirada cuando haya críticas constructivas hacia el manejo de la universidad.

¿Y en qué estamos ahora?

A pesar de que los roles en este conflicto están medianamente bien definidos, a excepción de Aldo Mariátegui que sigue en ferviente negación, surgen entrevistas que, no sé ustedes, dejan mucho que desear. Aunque, joder, a veces son entretenidas, como esta al abogado Jorge Avendaño.

Pregunta: ¿la terna de donde sale el rector siempre va a ser postulada por la misma universidad?

Respuesta: Esa es la propuesta. Eso no lo ha aceptado la universidad. No sé si lo aceptará todavía. Esa es la propuesta [blah blah] acá hay una discusión sobre quién manda verdaderamente en la universidad.

¿No que la PUCP se mantenía firme a que la Asamblea eligiera siempre al Rector? No entiendo por qué dice entonces que «no se sabe si la universidad aceptará esta propuesta todavía». Maybe I lost something in translation.

Sigue leyendo

One thing not to like about Peru: the Internet


The mystery of Peru’s crappy Internet speed hasn’t been solved yet

Trying to sign in to blog. Can't do.

Don’t get me wrong. I like my country, and I actually love it when I’m not in Lima but in any other province. I know PromPeru –government entity that promotes tourism– has made great efforts to highlight Peru’s most prominent attractions, but I really can’t lie to you all: it’s really crappy to get good communication here.

Today I was trying to log in to work, as I have done it for the past three or almost four years now, for my Canadian fellows (I won’t tell you the company’s name), and it was such a pain in the butt that I had to come here and blog about it. I know third-world countries (sorry Peruvian entrepreneurs, that’s where we are) aren’t supposed to have good quality Internet connection, but I really have to confess it’s starting to kill me nowadays.

Cultural shock

My boyfriend just came for the Holidays from the US, where he currently lives and studies, and ever since we have hooked up to the Internet on his laptop –I’m pretty sure he would want me to specifically say it’s a MacBook– this comment would come up: why is this connection so (damn) slow? I would go something like: you know it’s always like this babe, be a little patient. I guess I said that because he left Peru around three years, and he did remember how ridiculously slow our Internet speed could be. Then, this experience rises a question: has this changed at all ever since he left?

Maybe a little, but patience is over for me now too.

I have 2 Mpbs of Internet speed at home, and it sill it feels like 1 Mbps. Before I tell you what I found on the little research I carried out after my Internet speed sort of stabilized, let me explain something about Peru’s telecommunications system: it’s crap.

A little history

Back in the 80’s, telecommunications for Peru was equivalent to ONE national phone company, then Alan Garcia’s hyperinflation tore down everything that was good and valuable, leaving us without being eligible for credit nor any other hope for technological development. Along came Fujimori’s economic shock and sold that ONE national phone company to Spain, which is now known as MOVISTAR, formerly and still remembered as Telefonica del Perú.

There would have been nothing wrong about Peru selling the one phone company we had back at that time, if it wasn’t because it was sold in really crappy conditions: it was sold to become a telecommunications monopoly. That’s what it is right now.

I won’t deny there has been a major progress in Peru’s phone service, but it could have been MUCH BETTER if we had encourage market competitiveness in both mobile and landline phone services. I did a little research about Internet upload and download speeds in Latin America to see what’s going on, and I found some interesting stuff.

Peru versus the world

Let’s start with our neighbors. According to this post, which I will now consider reliable for the means of my post, in 2009 Peru had the slowest upload speed in South America, beating Uruguay by one notch (and we can all imagine how bad that can be). Our upload speed is 0.22 mbps versus Chile, who’s got 0.7 mbps (they’re number 1 on this ranking)… And Chile is just right next to us.

When it comes to download speed, the chart changes a little but not much. Peru is on the 6th place out of 10 countries in South America, with a download speed of 1.04 mbps, beating Venezuela, Ecuador, Uruguay and the Falkland Islands (again, are we all aware of how bad that looks?).

Even Cuba, where is already hard enough to even access the Internet, has better numbers than Peru: their upload speed is 1.11 mbps and their download speed is a surprising 2.35 mbps (faster than Brazil).

To make me feel even better, I looked up a little farther from Latin America, and I went all the way to Asia. According to Forbes, South Korea has the fastest Internet speed in the world, and they’re planning to boost residential connections to 1 Gbps for 2012. Apparently, they have like a super awesome strategy to give everyone good quality access to the Internet. God bless them.

Now I have to ask, what’s our problem then? Is it like not enough people in Peru use the Internet be worth the improvement of our connection speed? Is it that our market is not dynamic enough for Movistar to put a little more money down on this matter? Almost 26% of Peru’s population access the Internet nowadays, and our penetration levels are one the highest in the continent. Can anyone explain this to me?

Related topics:

Internet connection is interrupted in Peru [Spanish]

Association of Peru’s Internet Users (I had no idea this existed until today) [Spanish]

«Abimael Guzmán no es terrorista» vs Beto Ortíz


«Lo que se dio en el 80 fue un hecho político que tuvo causas económicas, sociales que correspondió a un momento determinado de la historia del Perú. Hoy es necesario cerrar ese capítulo y entrar a un proceso de reconciliación nacional»
Alfredo Crespo, abogado defensor de Abimael Guzmán
 

Es interesante como un discurso de reconcialiación, normalmente escuchado en tiempos post-modernos como los nuestros, pretende ser utilizado para justificar el terror y la violencia que aún pululan en la memoria de muchísimos peruanos. En una entrevista realizada hoy en el programa Abre los ojos, conducido por Beto Ortíz, Alfredo Crespo –ahora subsecretario de MOVADEF— declaró que el polémico movimiento político plantea una amnistía general para civiles, generales del Ejército y policías.

Muy pocas veces he visto a un periodista peruano insistirle a un entrevistado a responder directamente la pregunta que  le hace. Beto Ortíz debe conocer todas y cada una de las técnicas que se dictan en los media trainings de este país y hoy lo demostró. La gota que comenzó a rebalsar el vaso fue cuando Crespo dijo que su patrocinado «no es terrorista», refiriéndose a Abimael Guzmán. Ortíz le respondió: «ahí está, a ese punto es el que quería llegar».

La muerte mediática de Crespo comenzó ahí.

El entrevistado opinó también sobre el informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), creada durante el gobierno de Toledo: «ellos señalan que fue un conflicto armado interno y que tuvo causas sociales, económicas y políticas […] la responsabilidad es del Estado peruano, incluso de los indiferentes». Esto le basta para decir que las consecuencias de las acciones de Sendero Luminoso no pueden calificarse de terrorismo porque la responsabilidad es de todos y las causas son de índole socio-económico.

Got news for you: las causas y la responsabilidad de un hecho son independientes de la categoría que se le otorgue al hecho. Los movimientos radicales ideologizados pueden tener origen en un grave cisma socio-económico –y este no será el único factor– pero esto no los exime de convertirse en terrorismo. Los actores se convierten también en terroristas.

Me da la ligera impresión de que el MOVADEF pretende que todos nos abracemos en nombre de los derechos humanos. Patético. Tomar una conclusión general del informe de la CVR y descontextualizarla de toda la investigación que le antecede es pobre ejercicio mental que hasta ofende en lugar de dar gracia.

Aquí, un pedacito de la entrevista via canal gerardolipee2012 en YouTube:

Gastón Mansilla: la defensa propia en una ciudad pusilánime


Se abre el debate sobre cómo actuar –sin ser detenido en el intento– ante la inseguridad ciudadana en Lima

Gastón Mansilla detenido - Foto: Peru.com

¿A quién no le han robado? Sea de manera sigilosa, sin causar el menor rasguño, o de manera violenta, con moretones y sangre por doquier. Si a algún limeño no le ha sucedido aún, de seguro conoce al menos una persona cercana víctima de un asalto, ya sea con arma blanca o de fuego.

Hace un par de años, y de manera más prominente durante las elecciones municipales, varios medios de comunicación reportaban la preocupación de la ciudadanía ante la seguridad ciudadana. Jaris Mujica, reconocido antropológo e investigador peruano, dijo alguna vez que los índices de delicuencia en Lima no eran nada comparados con otras ciudades latinoamericanas, que las notas policiales  en TV o periódicos eran casos aislados y proyectaban –efectivamente– una sensación de inseguridad exacerbada.

Puede que esté en lo cierto, pero los casos aislados que muestra la cobertura periodística reflejan la particularidad de la delincuencia en Lima: asaltos «menores» a plena luz del día, con un bajo índice de captura efectiva y con altas probabilidades dejar libres a los asaltantes.

Un ejemplo: ¿han notado qué sucede en el transporte público cuando los ‘choros’ salen corriendo con la cartera o billetera de alguien? Nada. Muchas veces ni corren: salen caminando del bus de lo más tranquilos. Es muy probable que el cobrador y el conductor reconozcan a los asaltantes, pero siempre los dejan pasar y más aún salir con lo robado entre sus manos.

La noche del sábado 7 de enero, Gastón Mansilla, un estudiante universitario, se defendió antes dos delincuentes que intentaban asaltarlo, disparándole a uno de ellos. La otra ‘versión,  como dice la hermana de uno de los ‘choros’, fue que Mansilla defendió a otra persona que estaba siendo asaltada. Sea como fuere, murió uno de los asaltantes y el robo no se llevó a cabo.

No eran niños, ya que incluso uno de ellos era un prontuariado delincuente: Víctor Ríos Acevedo, AKA ‘Niño Viejo’, y Christan Arena, sindicado como cómplice.

Ante la mirada perpleja de la capital peruana, Mansilla fue detenido y enviado al Penal San Jorge –ahora Penal para Reos Primarios de Lima–, aunque leí que no estuvo en una celda para evitar contacto con los presos (felizmente). Este hecho capturó rápidamente la atención de los medios, y gracias a ello se le dio voz a los padres de Gastón. Aclararon que el joven portaba un arma de manera legal y que esa fue la primera vez que la usó.

Declaraciones irrisorias  Sigue leyendo